lunes, 16 de agosto de 2010

GOOGLE BOOKS, LA BIBLIOTECA MUNDIAL

No conformes con haber creado el buscador que revolucionó internet, los creadores de Google apuestan por otro ambicioso proyecto: escanear los libros de todo el mundo para que sean de libre acceso.

Lo que existe hoy

Hoy en día Google cuenta con su sección “Libros” en la que se pueden buscar más de siete millones de títulos, cada uno con su autor, género, clasificación, reseñas de los lectores, puntuación y lugar donde se puede comprar o biblioteca de la cual se puede pedir prestado. Estos libros se dividen en categorías: sin vista previa disponible (se ve únicamente la portada), con vista previa restringida (sólo se pueden ver algunas páginas o fragmentos), con vista previa (se pueden ver casi enteros) y vista completa.

Además, contiene una aplicación llamada “estantería electrónica”, que es gratuita y se incorpora al tener una cuenta de Google. Clasifica y acumula los libros que el usuario leyó o tiene reservados para leer y permite compartir opiniones con otros usuarios electrónicos.

El proyecto

Google planea hacer acuerdos con los editores de todo el mundo para escanear los libros y subirlos a Internet. Esto significa una inversión millonaria por parte de la empresa para establecer un registro de Derechos de Autor y pagar sus gastos legales.

Sin embargo, esto no sería poco beneficioso para el autor, ya que el convenio apunta a que el dueño de los derechos siga recibiendo dádivas por aquellos libros que son descargados, que serán pagadas por el usuario. También se incorporarían servicios de impresión y de suscripción.

Los libros

Algunos de los títulos que se pueden encontrar en versión completa en español son: “El Quijote de la Mancha”, el Diccionario de la Real Academia Española y casi todos los títulos de filosofía antigua tales como “Poética” de Aristóteles o “La República” de Platón, entre otros. Para más información el link es: http://books.google.com/



1 comentario:

  1. Si bien es bastante útil tener un libro en la computadora, mismo tener un e-book. Pero personalmente no cambio ir a una librería, recorrerla de arriba a abajo, perderme horas y horas dentro de esas librerías por nada en el mundo.

    Mientras no afecte ni a las editoras ni a los autores esta todo bien, creo. Ya si afectara a la industria, se debería re ver, y pensar en una norma reguladora... Pienso yo

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